Ideas para cocinas elegantes

Estamos de acuerdo. La cocina no tiene por qué ser un lugar aburrido. Por eso, hoy te presentamos distintas ideas para cocinas elegantes y sofisticadas. Los principales tips para que este ambiente tan importante del hogar, se llene de detalles innovadores que rompan el molde y le den un sello distinto. ¿Te animás ?

Negro y dorado

Estos colores forman un dúo que poco a poco se abrió paso en la decoración y, muy concretamente, en la cocina. Equilibrado con el blanco crea un conjunto elegante, sofisticado y muy personal.  Jugar con los contrastes aporta dinamismo.

Se puede apostar por combinar muebles oscuros, como los de nuestra línea Supreme Top Negra con griferías con acabado dorado. Si no te animás a tanto, podés pensar en pintar alguna pared en color oscuro logrando un punto focal. O elegir lámparas decorativas en color oro o incluso que los utensilios y accesorios sean de este color.

Si a los tonos metálicos

Los colores metálicos son aliados estratégicos para lograr este tipo de cocinas sofisticadas y elegantes. Una manera sencilla de incorporarlos es en electrodomésticos que queden a la vista, en lámparas, griferías, banquetas y/o repisas. Además que si optas por un material como el acero inoxidable, estos accesorios te durarán muchos años gracias a la resistencia y durabilidad de este metal.

Correcta iluminación

La iluminación desempeña un papel importantísimo a la hora de crear ambientes elegantes. Una manera infalible de lograr cocinas modernas es utilizar luces led. Pueden colocarse tiras debajo de los muebles de la alacena o en la campana extractora de humo.  Apostar por ellos es lo ideal porque son más eficientes y apenas desprenden calor.

También se puede optar por colocar estantes lumínicos como los de nuestra exclusiva línea Minoru Plus o hacer que la luz resplandezca de otras maneras, empleando materiales muy brillantes en la mesada por ejemplo.

Menos es más

En general lo elegante tiende a ser minimalista y de líneas simples. No satures el ambiente con objetos innecesarios. Es fundamental tener espacios despejados. Prescinde de objetos que ya no utilices, que no funcionen o ya no te gusten.